2 de octubre de 2012

A mis pequeños Dioses:

Sois crueles, no tenéis ninguna compasión.
Vuestra creación me ha costado más que cualquier otra cosa en el mundo.

Me habéis destrozado por dentro y ahora me curáis....

yo soy toda vuestra...

mi querida hija, cuando sonríes se para el mundo.
mi querido hijo tu fuerza y sensibilidad son únicas.

Al principio erais unos gusanillos...me acuerdo empezar a poneros delante del espejo para ver cuando os ibais a reconocer...con 2 meses...a partir de ahí empezasteis a aprender....

Sé que me necesitáis y entiendo que yo me haya convertido en un instrumento vuestro...

me gusta escucharos, ya tenéis mucho que decir...

vuestra madre orgullosa.


No hay comentarios:

Publicar un comentario